El patito feo, El traje nuevo del emperador, El soldadito de plomo, La sirenita... Debemos al danés Hans Christian Andersen algunos de los cuentos infantiles más famosos en todo el mundo. Por eso la fecha de su aniversario acoge un evento muy especial. Desde 1967, cada 2 de abril celebramos el Día Internacional del Libro Infantil. Una jornada para compartir cuentos, para descubrir bibliotecas, para fomentar la pasión lectora entre los más jóvenes.
Cada año, una sección nacional de la Organización Internacional para el Libro Juvenil (IBBY) se encarga de elaborar un mensaje dirigido a los niños de todos los países. Kęstutis Kasparavičius, de Lituania, ha sido el responsable de redactarlo en este 2019. El escritor e ilustrador ha escogido un lema verdaderamente acertado: "los libros inspiran pausa".
"Los libros ayudan a no acelerarse, enseñan a observar; los libros invitan, incluso obligan a acomodarse, pues casi siempre los leemos sentados, poniéndolos en la mesa o en el regazo, ¿no es así?
¿Y acaso no habéis experimentado otra maravilla: que cuando leéis un libro, el libro os lee a vosotros? Sí, sí, los libros también saben leer. Os leen la frente, las cejas, las comisuras de los labios, que ahora suben, ahora bajan; sobre todo, por supuesto, os leen los ojos. Y por los ojos entienden... adivinan... Bueno, ¡vosotros mismos sabéis qué!"
Kęstutis Kasparavičius - Mensaje para el Día Internacional del Libro Infantil 2019
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Contra el estrés, lectura
Los adultos nos hemos acostumbrado al apuro permanente. Vivimos prácticamente corriendo. Tenemos muchas cosas que hacer, demasiadas responsabilidades y muy poco tiempo. Al final de la jornada, a menudo nos sorprendemos derrotados en el sofá, con dificultades para encontrar la paz incluso después de haber respondido a todas nuestras obligaciones. Quizá la consecuencia más desagradable de este exigente ritmo de vida es que el estrés también alcanza a los niños. Las agendas apretadas, el escaso tiempo para conectar y las prisas les afectan a ellos tanto como a nosotros.
Encontrar un momento especial para leer juntos es un eficaz antídoto contra la angustia. Es una cuestión de voluntad, porque no hace falta más que un ratito cada día. Según un estudio realizado en la Universidad de Sussex en 2009, seis minutos diarios de lectura son suficientes para reducir hasta un 60% los niveles de estrés. "Leer ralentiza nuestro ritmo cardíaco, relaja la tensión muscular y mejora nuestro estado de ánimo", explican los autores del trabajo.
Sólo necesitamos adoptar el hábito, incluirlo entre nuestras prioridades. Tal vez sea tan solo cuestión de renunciar a actividades menos beneficiosas. La misma investigación indica que la lectura es una medida más eficaz contra el estrés que escuchar música o beber una taza de té. Tomar un libro entre las manos y disfrutar de un cuento relaja hasta tres veces más que dar un paseo y siete veces más que jugar a la videoconsola. En el curso «Cuentos que cuentan», Paloma Balandis y Cristina Saraldi te enseñarán a crear los momentos de lectura compartida que tus hijos y tú necesitáis. Si os acostumbráis a leer un cuento antes de dormir, ya nunca podréis renunciar a él.
Más información sobre el curso «Literatura respetuosa® en la infancia»
Libros para acompañar momentos difíciles
A veces el estrés no procede de las rutinas diarias, sino de un acontecimiento concreto. Cambiar de casa o de colegio, la pérdida o separación de un ser querido, los miedos... son problemas que afectan al estado emocional de los niños. Ante situaciones de este tipo, el acompañamiento de los padres puede ser tan importante como complicado. Los cuentos son una herramienta poderosa y eficaz para lograrlo. Por fortuna, la oferta actual es más abundante y variada que nunca. Librerías y bibliotecas proponen decenas de alternativas para ayudarles a identificar y gestionar sus sentimientos.
En el curso «Literatura respetuosa® en la infancia», Laura Richichi nos brinda claves para elegir libros adecuados en cada ocasión, también en momentos difíciles. "Al compartir ese momento de lectura ofrecemos un tiempo y un espacio de cercanía en el que nos mostramos disponibles para el niño. Puede estar con nosotros y conocernos en un lugar seguro, el lugar del cuento", comenta la profesora. Educación en valores, Acompañamiento emocional, el uso de libros informativos para responder a los intereses de los infantes... son algunos de los temas en los que profundiza durante el curso. Todo con un objetivo primordial siempre presente: sembrar en ellos la pasión por la lectura, antes incluso de que aprendan a leer por sí mismos. Porque leer no sólo les hará libres, sino también sanos, felices y despiertos.