Si algo deberíamos haber aprendido durante los últimos meses es que la pandemia es mucho más que COVID-19. Las restricciones y los cambios en nuestra manera de vivir, más allá de ser necesarios, tienen consecuencias importantes. Cada vez más voces alertansobre los problemas psicológicos de niños, jóvenes y adultos, en imparable ascenso desde marzo de 2020. Las situaciones de aislamiento forzado han afectado al equilibrio y el bienestar de personas de todas las edades.
Otros investigadores han examinado los efectos del uso de mascarillas. Especialmente entre los niños de menor edad, que obtienen de las expresiones faciales abundante información sobre quienes les rodean. El aprendizaje sobre las emociones empieza en la observación de los rostros, de los gestos, en la percepción del tono de voz... Publicaciones de prestigio como JAMA Pediatrics o PLOS One han dado a conocer los resultados de estudios sobre esta cuestión.
La buena noticia es que, en términos generales, puede decirse que las mascarillas no impiden que los infantes identifiquen las emociones. La mala es que, según las conclusiones de estos trabajos, los cubrebocas sí suponen una considerable dificultad para los más pequeños. Las investigaciones han demostrado que los niños cometen más errores al comprender emociones crece de forma notable cuando enfrentan un rostro parcialmente tapado por una máscara quirúrgica.
El problema no es grave, pero sí conviene tenerlo en cuenta y actuar en consecuencia. Y podemos hacerlo tanto en la escuela infantil, donde las educadoras continúan usando mascarilla, como en casa, aprovechando que allí no solemos llevarla. En los cuentos, por ejemplo, encontramos una herramienta útil para hacer hincapié en la exploración de emociones junto a los niños.
Más información sobre el curso «Literatura respetuosa en la infancia»
Cómo descubrir y acompañar emociones a través de los cuentos
En la actualidad no es difícil encontrar libros y álbumes ilustrados orientados a trabajar las emociones. El catálogo de librerías y bibliotecas es cada vez más amplio, con propuestas para todas los gustos. La clave, por tanto, no está en la oferta; sino en la forma en que demandamos. Entre tantas alternativas, lo esencial es desarrollar un criterio para escoger lecturas oportunas, ajustadas a las necesidades y la etapa de desarrollo de cada niño.
"Al compartir cuentos con ellos es importante en confiar en su capacidad de leer las historias a nivel emocional", explica Laura Richichi. Confianza que debe partir de los acompañantes, pero también plasmarse en los libros escogidos. Para Laura, durante los últimos años se han publicado libros con un enfoque rígido y excesivamente simple. "Nos hemos acomodado en la lectura de libros que catalogan y definen las emociones, para de algún modo controlarlas", apunta.
"Es importante ayudarles a conocer las emociones desde la infancia, pero desde la libertad de entender, percibir y vivir la emoción, no tanto catalogándola", añade. Laura, fundadora de La Cuentería Respetuosa, acumula varios años de experiencia asesorando a familias sobre esta materia. En Escuela Bitácoras encontrarás tres cursos guiados por ella, que te permitirán aprovechar al máximo las lecturas que compartas con niños y niñas.
- 1 «Literatura respetuosa® en la infancia» (fundamentos generales)
- 2 «Literatura respetuosa® desde los 2 hasta los 5 años»
- 3 «Literatura respetuosa® desde los 5 hasta los 9 años»
Otros cursos sobre literatura y cuentos infantiles en Escuela Bitácoras
Más información sobre el curso «Acompañamiento emocional»
Más recursos para el acompañamiento emocional en la infancia
La lectura compartida de cuentos es una herramienta fundamental para explorar emociones con niños y niñas. Pero hay más. Cuantos más recursos manejamos, mejor podemos ofrecer apoyo en circunstancias diferentes. Porque la infancia es la etapa en que aprendemos a escuchar emociones o a ignorarlas, a procesarlas correctamente o a interpretarlas de manera errónea. Lo que metemos en la mochila en la niñez es lo que llevamos con nosotros durante toda la vida.
En Escuela Bitácoras encontrarás cursos que te ayudarán a entender y acompañar emociones desde ángulos diversos. No se trata de reservar una hora al día para explorarlas, sino de tenerlas siempre presentes. Lo hacemos en el juego, mientras disfrutamos juntos. También en los cuidados, momentos de intimidad. Prestamos atención a las emociones al comunicarnos, al elegir las palabras y la manera de decirlas. Hay aspectos emocionales que influyen incluso en nuestros hábitos a la hora de comer.
Aquí puedes ver algunos enfoques de nuestros cursos sobre emociones y acompañamiento emocional.
- "Las emociones que no son expresadas no desaparecen. Se acumulan y generan angustia". Del curso «Acompañamiento emocional», por Laura Estremera.
- "Educar siempre debería llevar implícito pasarlo bien". Del curso «Las emociones en los niños», por Cristina Gutiérrez.
- "Cuando no se validan emociones en la infancia, suelen aparecer sentimientos de culpa en edad adulta". Del curso «Alta Sensibilidad en la infancia», por Blanca Torres.
- "Estamos acostumbrados a juzgar y nos cuesta observar. Estamos acostumbrados a no escuchar las emociones y nos cuesta abrazarlas". Del curso «Comunicación no violenta», por Nuria Gallego.
- "Existe una necesidad de generar espacios de exploración del universo emocional desde el juego, para niños y para adultos". Del curso «Creatividad y gestión emocional», por María José Llorente Wattenberg.